Alas de Atenea

 

(Apolodoro):

[Durante la Gigantomaquia], Atenea arrojó sobre Encélado fugitivo la isla de Sicilia y habiendo arrancado la piel a Palante, con ella protegió su propio cuerpo en el combate.

 Algunos mitógrafos aseguraban que Palas, quizá Palante, un gigante cabrío con alas, era el padre de Atenea, que trató de violar a su hija. Atenea lo mató, lo desolló y se puso las alas de su padre en sus propios hombros. Así lo dice Robert Graves, por ejemplo.